Hacer el amor contigo, es asi...

Hacer el amor no es algo que se pueda sentir con cualquiera, tienes que percibir a la persona que más quieres, para estremecerte débilmente mientras te adentras a su cuerpo. Acercar tus labios a los suyos hasta llegar a un beso enredado en vuestras lenguas, tocar su piel y que en ella sientas la exhalación que la cubre, arrullar su pelo con fervor hasta que vuestros cuerpos se desnuden para percibir la pasión. Notar su palpitación a escasas distancias de tu entidad, agarrarle las manos fuertemente mientras vuestros cuerpos se unen, fusionando así la exaltación, la fogosidad, el amor más grande que se haya podido formar jamás y que ello produzca jadeos, la respuesta a la satisfacción, la forma más bonita de decirle lo mucho que le quieres con un lenguaje inteligible, pero que, al escucharlo, el ritmo de vuestro apego se precipite. La sangre se acelera, hierve, involucrando así la lujuria de quererse hasta la saciedad, de desear con ansia que el momento no se acabe, para que el calor no se convierta en frío, que os separéis y no notar la aceleración que hacía saciar tu sed… Que tengas la segurida que su espalda que necesita tus manos para agarrarlo con todas tus ganas, que en su pelo desbarates la pasión y en sus manos la resistencia… Tener la capacidad de escuchar los latidos de su corazón, los gemidos causados por la satisfacción y, lo mejor, sentir que entre tú y él no hay distancia, que os aferréis en el ímpetu y, así, no separarse nunca. Que pases toda la noche invitándole a la codicia de jugar con tu piel, hasta despertar a su lado, que los rayos del sol empiecen a asomarse por las rejillas de la ventana y que aún sea su pecho el que cubra tu pelo y tus manos, las que enreden su cuerpo, que ya no necesites mantas para protegerte del frío, si encuentras en sus brazos el arrope que precises. Que amanezcas con el amor de tu vida, aquel que hace unas horas se unió a tu ser y el mismo que muere de ganas por pasar otra noche junto a tu piel… Es algo irrefrenable lo que sucede cuando dos cuerpos se hacen uno, como si todo lo que sucede alrededor de éstos desapareciera…